El pastel de Belem, un dulce típico de Portugal

El pastel de Belem es el postre estrella de nuestro país vecino. El original se realiza en una sola tienda que se localiza en Lisboa, concretamente en el barrio de Belem que da nombre a los pasteles. La pastelería de llama Pastéis de Belém y comenzó a vender estos pastelitos en el año 1837. Su receta ha ido pasando de generación en generación. Desde la tienda dicen que hoy, siguen realizándolos según la receta original.

Según el  gerente de la pastelería, Miguel Clarinha solo ocho personas conocerían la receta original. Se conocen los ingredientes, pero tanto el hojaldre como la crema que se hace con huevo, leche y azúcar se hacen en un taller secreto.

Es cierto, que aprovechando la demanda, muchas pastelerías han comenzado a vender estos dulces. Pero los turistas hacen colas a diario para probar los pasteles originales. No en vano Pastéis de Belém viene a facturar unos 9 millones de euros al año. Desde la pastelería no se ven tentados a expandirse y exportar porque como señala su gerente: “para ello tendríamos que congelar los pasteles y eso conllevaría una pérdida de calidad que no se justificaría“.

Lo especial del pastel de Belem es la combinación de sus ingredientes que funciona muy bien en el paladar. Se trata de una base muy fina de un hojaldre de la máxima calidad que se rellena con  una crema de una textura, una aroma y un dulzor muy particular. Lo cierto es que una vez que pruebas el pastel de Belem no olvidas su sabor, que tiene un toque de lo más tradicional.

La leyenda del surgimiento del pastel de Belem

La leyenda da una explicación al surgimiento de los pasteles de Belem. En 1820 en Portugal tuvo lugar la Revolución Liberal que llevó al cierre de los conventos. Así se dejaron de elaborar la mayoría de los dulces típicos del país. Un vecino del barrio de Belem de Lisboa, que estaba cerca de una refinería de azúcar asociada al Monasterio de la Orden de los Jerónimos aprovechó la coyuntura y montó un pequeño puesto para vender pastelitos. Así surgió el negocio que habría triunfado y a día de hoy factura cifras millonarias.

En Pastéis de Belém trabajan hoy unos 180 trabajadores que elaboran las 20.000 unidades de pasteles  de Belem, o pasteles de nata como también se les conoce, que se venden cada día.

Las recetas que circulan de los pasteles de Belem son todas muy parecidas. Y.  aunque, obviamente no van a saber como la original, si no se tiene opción de viajar a Lisboa para probarlos se puede probar a hacerlos. También se venden moldes para darles su forma original, estos suelen tener una base de 5,5 cm. que en la parte superior se amplía hasta 7,5 cm y la altura es de unos 3 cm.

Para hacerlos necesitareis hojaldre, leche entera, nata, canela, piel de limón, azúcar, yemas de huevo y harina de trigo. Es una receta bastante fácil que te llevará un poco más de media hora.

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